lunes, 28 de marzo de 2016

Te extraño

  Pienso, y no puedo dejar de pensar desde el día que partiste. No puedo entender cómo de un día para el otro te pudiste ir, sin darme un último abrazo, un último beso y dejarme despedirte como lo merecías.
Tampoco perdono a Dios por llevarte, estabas muy bien de salud, todos los análisis y controles estaban bien, no fumabas ni tomabas.
  Dejaste tanto vacío en mi, tanto dolor, tanta angustia, todos los sentimientos juntos. Todavía sigo esperando que al entrar a tu casa estés esperándome ahí con la comida tan rica que preparabas, pero siguen pasando los días y no volvés. Imaginate que ya es grande tu casa, y sin vos es inmensa, vacía..
  Ya no se cómo explicar la falta que me haces, y recién pasaron 13 días desde que partiste. No me imagino cuando pase un año, o dos, o tres..
Sigo con el enojo y la angustia de que no pude despedirme, es algo que jamás voy a perdonarme, aunque tampoco sabía que era tu tiempo de partir. Capaz parezco egoísta, pero te sigo necesitando conmigo. Sé que esa operación te tiró un tanto abajo, el hacer reposo no era lo tuyo, siempre fuiste una persona muy hiperactiva.
Fuiste una persona única, una persona que se preocupaba por todos, una persona que le encantaba ver comer a los demás, pero ojo, vos comías como un pajarito. Una persona que nunca escuché decir malas palabras (sólo en ocasiones muy especiales). Una persona solidaria, siempre dándole una mano a los que más necesitaban. Creo que no hace falta describirte tanto, los que te conocieron saben bien la hermosa personita que fuiste.
  Todavía no tuve la oportunidad de volver a verte, ni siquiera en mis sueños, otra de las cosas que me angustia. Cada noche pienso en vos, en cada momento que pasamos juntas, hasta los últimos.
  Quisiera que fueran miles más, pero el destino no quiso. Quisiera tratar de no recordarte tanto, porque siento que cada día que paso sin vos, menos lo voy a poder superar. Quisiera que las cosas hubiesen sido distintas, tal vez todavía estarías con nosotros. Pero cómo dicen todos "así es la vida", hoy vivimos, mañana no sabemos. Quisiera encontrar a esas dos "personas" que te empujaron por el simple hecho de sacarte un par de pesos, juro que se hubiesen arrepentido toda su vida. Ojalá Dios los haya castigado, como les dijiste, y se haya hecho justicia. Pero bueno, ahora no hago nada con pensar en todas estas cosas, ya no estas conmigo y es lo único que pienso cada día.
  Ojalá muy pronto nos reencontremos, porque lo necesito más que a nada abuela. Te amo vieja linda y te extraño una eternidad.

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